Un estudio de Greenpeace revela que España destina 23.330 millones de euros anuales en subvenciones perjudiciales para el medio ambiente, lo que agrava la crisis climática y social. El informe "De subvenciones tóxicas a inversiones responsables" destaca que el 86% de estas ayudas se dirigen a sectores nocivos, como la agricultura, el transporte y la energía. A pesar de los compromisos del gobierno, no existe una estrategia clara para eliminar estas subvenciones dañinas. Greenpeace exige mayor transparencia y redirigir fondos hacia iniciativas sostenibles que beneficien a hogares y pequeñas empresas. Para más información, visita el enlace de Greenpeace.