El Mare Nostrum, un mar de plástico
Un reciente estudio ha puesto de manifiesto que el Mare Nostrum se está transformando en un mar de plástico, afectando incluso a los ecosistemas más protegidos. Esta investigación, la primera en su tipo, revela el impacto de la contaminación por microplásticos y micropartículas de caucho sobre las poblaciones del coral Cladocora caespitosa, una especie endémica en peligro de extinción del Mediterráneo. Las Islas Columbretes, situadas a 60 kilómetros de las costas de Castellón y catalogadas como reserva marina, han sido el foco de este alarmante hallazgo.
Los científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), específicamente del Instituto de Acuicultura Torre de la Sal (IATS), han recolectado muestras que superan las 6.000 partículas por kilo de sedimento entre las estructuras formadas por estos corales. Esta cifra es notablemente superior a las registradas en otras áreas del Mediterráneo. El estudio ha sido publicado en la revista Marine Pollution Bulletin.
Investigación internacional sobre microplásticos
El equipo del IATS-CSIC, en colaboración con investigadores del Instituto de Geociencias de la Universidad de Kiel y del Departamento de Química Ambiental Inorgánica del Helmholtz-Zentrum Hereon en Alemania, ha analizado las concentraciones tanto de microplásticos como de pequeños fragmentos de caucho, conocidos como microrubber, presentes en las colonias de Cladocora caespitosa. Los microplásticos son residuos que miden menos de cinco milímetros y pueden originarse a partir de plásticos más grandes, fibras textiles o productos cosméticos.
Las muestras fueron tomadas en cinco puntos diferentes dentro del ecosistema columbreteño, tanto dentro como fuera de las estructuras coralinas. Posteriormente, se analizaron en laboratorios alemanes libres de contaminación plástica. “Encontramos microplásticos en todas las muestras; sin embargo, las concentraciones más elevadas estaban dentro de las estructuras coralinas”, explica Diego Kersting, investigador del CSIC y líder del estudio desde el IATS. Las concentraciones varían desde 41 partículas por kilo en los puntos más alejados hasta 6.345 partículas dentro de los corales, con un promedio general que alcanza las 1.514 partículas por kilo.
Efecto trampa y comparación con otros ecosistemas
Lars Reuning, investigador asociado al estudio desde la Universidad de Kiel, destaca que estos valores superan significativamente aquellos observados en otras zonas del Mediterráneo occidental. Un lugar comparable es el Archipiélago de Cabrera en Baleares, donde también se han detectado altas concentraciones. Este fenómeno podría atribuirse al denominado “efecto trampa” que ejercen tanto las colonias coralinas como los bosques submarinos de posidonia para retener estas partículas contaminantes arrastradas por la corriente.
"En Columbretes, la forma en C de la bahía Illa Grossa también contribuye a acumular contaminantes", añade Reuning. La situación resulta paradójica al encontrarse tales niveles elevados de microplásticos en áreas tan protegidas.
Origen y consecuencias globales
La mayoría (80-90%) de los microplásticos detectados proviene principalmente de basura acumulada en el Mediterráneo, transportada hacia Columbretes por corrientes provenientes del Norte y Noreste. En cuanto a los fragmentos microrubber, su origen radica en el desgaste de neumáticos terrestres que llegan al mar a través de ríos. Se estima que alrededor del 80% del plástico presente en los océanos tiene su origen terrestre. "Este caso ilustra cómo la basura puede llegar a cualquier rincón debido a la globalización", concluye Kersting.
Pendiente el impacto sobre el coral
Aún no se conocen los efectos específicos que esta acumulación puede tener sobre la salud del coral Cladocora caespitosa. “Serían necesarios estudios adicionales realizados en acuarios que podríamos llevar a cabo en nuestro instituto”, señala Kersting. Sin embargo, ya se sabe que los corales pueden incorporar sustancias nocivas como cenizas procedentes de combustibles fósiles a sus esqueletos.
"Se ha establecido que efectos adversos pueden surgir con tan solo 540 partículas por kilo seco; nuestras mediciones están muy por encima", advierte el investigador.
Desafíos para la conservación marina
A pesar del estatus protegido del entorno columbreteño, este estudio demuestra que no está exento ante amenazas globales como los microplásticos. El equipo liderado por Kersting considera que estas islas representan un laboratorio valioso para estudiar cómo fenómenos globales como el cambio climático afectan a los ecosistemas marinos locales.
A medida que avanza la investigación, se ha comprobado que el calentamiento mediterráneo genera estrés en este coral único capaz de formar arrecifes similares a los tropicales, lo cual afecta su crecimiento e incluso puede llevarlo a la muerte. Para mitigar esta problemática, los investigadores sugieren implementar medidas como prohibir plásticos desechables, mejorar tratamientos para aguas residuales y fomentar un reciclaje adecuado.
La noticia en cifras
Descripción |
Cifra |
Concentración más baja de microplásticos y microrubber por kilo de sedimento seco (puntos alejados de los corales) |
41 partículas |
Concentración más alta de microplásticos y microrubber por kilo de sedimento seco (dentro de estructuras coralinas) |
6,345 partículas |
Concentración media de microplásticos y microrubber por kilo de sedimento |
1,514 partículas |
Porcentaje estimado de plásticos que llegan a los océanos desde fuentes terrestres |
80-90% |
Preguntas sobre la noticia
¿Qué se ha detectado en las Islas Columbretes?
Se han detectado concentraciones “excepcionalmente altas” de microplásticos y micropartículas de caucho en las poblaciones de coral Cladocora caespitosa, una especie en peligro endémica del Mediterráneo.
¿Cuál es la fuente de los microplásticos encontrados?
Los microplásticos provienen de diversas fuentes, como la degradación de plásticos más grandes, la liberación de fibras textiles o productos cosméticos. Se estima que el 80-90% de las partículas detectadas son plásticos que llegan al océano desde fuentes terrestres.
¿Qué impacto tiene la contaminación por microplásticos en los corales?
Aún se desconocen los efectos específicos que la acumulación de microplásticos puede tener sobre la salud del coral Cladocora caespitosa, pero se sabe que concentraciones superiores a 540 partículas por kilo seco de sedimento pueden tener efectos adversos.
¿Qué medidas se proponen para mitigar esta situación?
Los investigadores proponen prohibir los plásticos de un solo uso, mejorar los tratamientos de aguas residuales y fomentar el correcto reciclaje de plásticos como medidas para paliar la contaminación por microplásticos.
¿Por qué es preocupante encontrar microplásticos en áreas protegidas?
A pesar de estar en áreas protegidas como las Islas Columbretes, la contaminación por microplásticos demuestra que las amenazas globales afectan incluso a los ecosistemas más resguardados.