El fondo de 6.000 millones de euros, cifra “bastante impresionante” según Angela Merkel, se utilizará para garantizar que los menores de 25 años que dejen el sistema educativo consigan trabajo, prácticas o más formación en un plazo máximo de 4 meses.
Los 27 han decidido, además, destinar al empleo juvenil el sobrante del presupuesto comunitario del periodo 2014- 2016, lo que podría suponer una cantidad adicional de 2.000 millones de euros. El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha expresado su confianza en que el fondo alcance los 8.000 millones de euros, una cantidad que la canciller alemana ha pedido que se gaste de forma “sensata”.
España tiene una tasa de paro juvenil del 56,4%, solo superada por Grecia, por lo que será una de las principales beneficiarias del fondo. El Gobierno estima que recibirán 1.900 millones de euros en los próximos dos años.