El videojuego, ideado por 3 Brothers In Law, convierte a Rajoy, Cospedal, Wert y Merkel en los enemigos de la enseñanza pública que el jugador tiene que destruir con la fuerza de la cultura y es el resultado de un encargo de la Asamblea de Docentes de Guadalajara para apoyar la enseñanza pública, a la que el Gobierno de Rajoy ha recortado ya 5.000 millones de euros de presupuesto.
Los jugadores se enfrentan a cuatro villanos con parecidos razonables a los que quieren privatizar la Educación: Mariano -vestido de colegial-, Cospe -con mantilla y peineta-, Güert -con sotana y crucifijo- y Merkenstein -con afilados colmillos-.
Los defensores de la Educación Pública tienen varias armas con las que derrotarlos: pueden lanzarles libros, entretenerles con sobres llenos de billetes -"porque conocemos sus debilidades" y, por último, activar cerca de ellos un megáfono con las consignas de la Marea Verde, lo que los fulmina de una vez por todas.