Familias numerosas, con hijos de diferentes parejas o con custodia compartida; padres o abuelos que eduquen en solitario a sus hijos y familias con niños adoptados son algunos de los perfiles que busca el coach de Cuatro para sus nuevas entregas.
Lloran, patalean, tienen celos de sus hermanos, están enganchados a la videoconsola, faltan al respeto a sus padres e incluso originan discusiones que afectan directamente a la pareja. Problemas como estos tienen solución a través de 'Supernanny', por ello la productora del espacio, Magnolia TV, ha comenzado la búsqueda de familias con niños de entre 2 y 10 años que quieran resolver los problemas de conducta de sus hijos siguiendo las directrices de la psicóloga Rocío Ramos Paúl.
Al igual que en temporadas anteriores, las grabaciones del programa, se adaptarán a la rutina de las familias para así no interferir ni en las actividades cotidianas de los niños ni en sus horarios habituales.
La séptima entrega del coach consiguió situarse como segunda opción de los viernes en su franja de emisión con una media de superior a los 1,4 millones espectadores y un 8,9% de share, superando a Antena 3 a laSexta. En el target comercial, la diferencia fue mayor: la oferta de Cuatro promedió más de un 11%. A lo largo de la esta temporada, 'Supernanny' abordó casos surgidos en modelos familiares inéditos hasta el momento en el programa: ayudó a afrontar una difícil convivencia en una familia que adoptó a tres niños; asesoró a una madre que, tras su separación, se vió obligada a afrontar en solitario la educación de sus tres hijos, dos mellizas de 3 años y un niño de 5; y orientó a una abuela que consentía a sus nietos todo aquello que le pedían, entre otras situaciones.
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