“Nadie del reparto o del equipo técnico resultó herido, y la producción continuó inmediatamente”, aseguró Paramount mediante un comunicado. El incidente quedó en susto gracias a que Bay supo esquivar el aparato que le lanzó el asaltante, con quien forcejeó hasta que el equipo de seguridad pudo reducirle.
Fuentes de la producción sostienen que el individuo se encontraba “bajo la influencia de algún narcótico”. Posteriormente la policía arrestó al asaltante junto a sus dos acompañantes, evitando que el incidente pudiese volver a producirse. Michael Bay dio su propia versión de los hechos desde su página web, afirmando que “unos tipos drogados” molestaron al personal que trabajaba en la película con el objetivo de extorsionarles.
Según el realizador, el asaltante formaba parte de un grupo de comerciantes de la zona que pretendía conseguir cuatro veces más de la cantidad que se pagó al resto de tenderos. “A cada comerciante se le paga un precio justo por las molestias”, comentó Michael Bay, “Caminó directamente hacia mí y trató de pegarme en la cara, pero me agaché, tiré la unidad de aire acondicionado al suelo y le empujé. Entonces fue cuando los de seguridad se lanzaron sobre él. Fueron necesarios siete tipos grandes para reducirle. Era como un ‘zombie’ de la película de Brad Pitt ‘World War Z’”.
Pese al incidente y el susto recibido, Michael Bay ha querido recalcar que tras lo ocurrido tuvieron un “gran día de filmación en Hong Kong”.
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