Una silla para Samantha

Una silla para Samantha

jueves 16 de octubre de 2014, 19:14h

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Samantha era una niña cordobesa con un brillante futuro por delante que iba a verse truncado por la situación económica de su familia. Ahora su futuro se ve más claro gracias a la puja “La silla de Samantha”

Una silla para Samantha

Y es que un buen día, el director del colegio Virgen del Carmen de Córdoba comentó a unos amigos personales, muñidores de la empresa Scrum&sons, una agencia de creatividad publicitaria, el pesar que sentía por Samantha cuya situación familiar iba a impedirla seguir cursando sus estudios.

Esta estudiante andaluza está en el cuarto curso de la ESO y su carrera futurible como médico iba a truncarse porque su madre (se trata de una familia monoparental) es una mujer pluriempleada que a duras penas llega a cubrir los costes de la supervivencia de ambas cada mes.

Esta historia es una más fruto de la crisis económica acuciante y verídica en nuestro país, aunque en este caso todo parece indicar que tendrá un final ciertamente más afortunado. Todo porque Luis María García Moreno, creativo publicitario de la agencia junto con el resto de sus compañeros activaron con ella esa bombilla solidaria que todos tenemos pero solo es capaz de mover los grandes retos. Y así nació la web y la puja «La silla de Samantha».

En www.lasilladesamantha.com, activa desde el pasado lunes 27 de mayo, se realiza una puja por el asiento que ocupará Samantha durante el próximo curso  y la puja ya supera los 580 euros que ofrecen un particular en eBay.

Puede parecer mucho dinero por una silla, aunque la meta altruista de los profesionales que han inspirado esta campaña social es la de «llegar hasta los 3.000 euros con los que la joven podría estudiar sin problemas todo el curso que viene», admite García Moreno.

Con un hilillo también de emoción y aprecio por lo correcto, añade que como todas las subastas legales en la plataforma eBay estará activa diez días (por lo que vence el próximo miércoles) y que será a partir de entonces cuando entreguen a la familia de Samantha lo recaudado. 

“Ellos están informados de la propuesta social, la conocen, están muy contentos, pero quieren ser celosos de su intimidad”. “Saben del revuelo que está generando la iniciativa, pero quieren proteger a toda costa a Samantha. No quieren desestabilizarla”, dicen desde la agencia colaboradora. 

Con la piedra rosetta de la escritura

Además, el precio no viene sólo justificado por el «leit motiv», sino también por la “pieza única” de la que se trata, un mueble diseñado por el propio Antonio Serrano que, además de protagonizar el spot de la campaña con el que se ha logrado convertir el movimiento en uno de los más virales y compartidos en redes sociales y colectivos de personas, se ofreció desinteresadamente a diseñar la mejor silla para Samantha.

 Ídem de ídem hicieron la fotógrafa Cristina Rodríguez, el equipo de la producción a cargo de Valentina's Factory, el equipo de Scrum&sons, Manuel Torres en la realización del vídeo y el estudio de diseño Mad-Lab.

La silla, como explica el propio diseñador del mueble, es una de las famosas “living block chair” acuñadas por su firma. “Serrano se enamoró de la propuesta de Scrum&sons de inmediato», coteja García Moreno, y así nació su modelo que tiene, por descontado, un gran valor en el mercado. Es una pieza muy especial, que el propio responsable califica de “simbólica, porque está hecha con la piedra rosetta descubierta en 1789 y que supuso una auténtica revolución para la traducción, la escritura y, a la postre, la educación que es de lo que se trata”.

Porque un mundo más solidario es posible y nadie debería tener que quedarse sin formarse por culpa de las circunstancias económicas. Nosotros nos unimos a esta iniciativa y pedimos vuestra colaboración. 

Una silla para Samantha
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