El juez investiga las lesiones sufridas por un joven que perdió el bazo durante la huelga del 29M, para lo cual, según fuentes judiciales, el titular del Juzgado de Instrucción número 24 de Barcelona va a encargar la próxima semana, además del informe elaborado por el departamento de Interior sobre el uso de las mismas elaborado a raíz del caso de Esther Quintana, una pericial sobre la peligrosidad de las pelotas de goma.
Ante el juez han comparecido hoy en calidad de imputados dos agentes que dispararon proyectiles de precisión y ocho escopeteros de la unidad Dragó 40 de los Mossos d'Esquadra, entre ellos el que ya está imputado en la causa abierta por otro juez por el caso Quintana.
Los escopeteros admitieron que el 29M dispararon pelotas de goma siguiendo órdenes de sus superiores -el director de la Policía lo autorizó ante los disturbios que había en el centro de Barcelona-, aunque no se han querido reconocer en las imágenes grabadas que les muestran disparando, según las mismas fuentes.
Una vez que los 22 mossos imputados han comparecido ante el juez de instrucción -sólo ha quedado por comparecer un escopetero que hoy no ha podido acudir porque está de baja-, lo más probable es que durante la próxima semana se levante la imputación sobre varios de ellos y sólo se mantenga sobre los implicados que actuaran ese día más cerca de la zona en la que el joven sufrió la lesión en el bazo.
Cuando el juez haya delimitado estas imputaciones, se presume que procederá a encargar las periciales, entre ellas una sobre las lesiones que obligaron a extirpar el bazo al joven, que cruzaba el centro de la ciudad al término de una manifestación por la huelga general del 29 M del pasado año en Barcelona, que se saldó con graves disturbios.
La intención del juez, según estas fuentes, es encargar también una pericial para analizar en profundidad los riesgos que entraña para los ciudadanos el uso de pelotas de goma, que desde hace años varias entidades han querido prohibir por las lesiones que provocan con el impacto.
Se da el caso de que además la próxima semana, concretamente el miércoles 29 de mayo, el conseller de Interior, Ramon Espadaler, inaugurará la ronda de comparecencias de la comisión del Parlament en la que se estudia el uso de las pelotas de goma por parte de los antidisturbios de los Mossos, a raíz de la polémica por el caso de Esther Quintana, que perdió un ojo a raíz de un incidente similar.
Según el protocolo, para poder disparar pelotas de goma se requiere la autorización del director de la policía y, una vez obtenido, los escopeteros tienen que disparar contra el suelo, por lo que el proyectil rebota y tiene un recorrido incierto, lo cual puede dar lugar a accidentes como los ocurridos y demandados.
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