El anteproyecto lanzado por el ministro Wert parte de presupuestos social y ecológicamente inaceptables. No prepara a las generaciones venideras para las dificultades socioambientales que ya existen, deja fuera las enseñanzas socioambientales, dando la espalda a los graves problemas ecológicos y de justicia social que se han de afrontar para la construcción de un mundo más justo y sostenible- señalan.
El anteproyecto de ley pone claramente en el centro el crecimiento económico y los mercados olvidando que precisamente la ignorancia de los límites de las personas y del planeta por parte de esta economía nos han llevado a las situación de crisis que vivimos-añaden.
Para más inri, el anteproyecto de Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) atenta contra la participación y la democracia de los centros, al concentrar el poder en la dirección y eliminar la capacidad de decisión del consejo escolar, impidiendo así una cultura escolar de personas críticas y participativas-concluyen.
Con la reforma se busca que centros de diferentes contextos y condiciones compitan en resultados a través de evaluaciones externas, homogéneas y descontextualizadas, pues no atienden a circunstancias particulares ni a elementos de diversidad cultural o recursos. Todo ello ahondará y fomentará la desigualdad social, que además queda patente por “mejoras” como: incrementar la tasa de alumnos excelentes, adelantar la elección de trayectoria y dificultar con revalidas el itinerario educativo.
El sistema rígido que propone la LOMCE no colabora a crear personas preparadas para afrontar situaciones diversas, sino que pretende conducirlos a visiones rígidas y mercantilistas y con ella aumentará el poder de las empresas en la formación profesional, que será previsiblemente utilizado para contar con mano de obra precaria-añaden.
Con la LOMCE, la educación deja de ser un derecho básico para convertirse en un servicio que se oferta en el mercado, convierte a los sujetos de derecho en clientes que podrán consumir una u otra oferta de enseñanza en función de su poder adquisitivo y además, promueve definitivamente un modelo de crecimiento que está resultando suicida para el planeta-resume esta organización.