Greenpeace ha celebrado la obtención de 60 ratificaciones para el Tratado Global de los Océanos, lo que permitirá su entrada en vigor en 120 días. Este acuerdo es crucial para proteger el 30% de las aguas internacionales antes de 2030, un objetivo que requiere la protección anual de áreas equivalentes al tamaño de Canadá. España se convirtió en el primer país europeo en ratificar el tratado, destacando la importancia del liderazgo en la conservación oceánica. Greenpeace insta a todos los países a ratificar el acuerdo y a trabajar en la creación de santuarios marinos para mitigar la crisis climática y garantizar la seguridad alimentaria. La organización también aboga por una moratoria sobre la minería submarina, una actividad que amenaza gravemente los ecosistemas oceánicos.
Greenpeace celebra un hito histórico en la protección de los océanos
La organización medioambiental Greenpeace ha anunciado con entusiasmo que el Tratado Global de los Océanos ha alcanzado las 60 ratificaciones necesarias para su entrada en vigor, lo que sucederá en un plazo de 120 días. Este acuerdo representa un avance significativo hacia la conservación de las aguas internacionales y subraya la urgencia de que los países adopten medidas concretas antes de la primera Conferencia de las Partes (COP) sobre océanos, programada para 2026.
Greenpeace hace un llamado a todos los Estados que aún no han ratificado el Tratado a hacerlo antes de esta cumbre crucial. La falta de ratificación podría excluir a estos países de futuras negociaciones sobre la protección del océano.
En la actualidad, solo el 0,9% de las aguas internacionales está completamente protegido. Por ello, el Tratado se convierte en una herramienta vital para establecer santuarios marinos que ayuden a mitigar la crisis climática y garanticen la seguridad alimentaria de miles de millones de personas dependientes de los recursos oceánicos. Un análisis reciente indica que, para alcanzar el objetivo del 30% de protección antes de 2030, se necesitaría resguardar más de 12 millones de km² anualmente durante los próximos cinco años, equivalente al tamaño total de Canadá.
El pasado 4 de febrero, España se convirtió en el primer país europeo en ratificar este acuerdo histórico. Ana Pascual, responsable de la campaña Oceánica en Greenpeace España, destacó el liderazgo del país al depositar su ratificación ante Naciones Unidas y pidió que continúe liderando en la protección oceánica mediante propuestas concretas para la próxima COP.
Greenpeace también resalta el poder colectivo que tienen los ciudadanos cuando se unen por una causa común. Más de tres millones de personas han apoyado esta campaña, incluyendo figuras destacadas como Javier y Carlos Bardem, Penélope Cruz y Alejandro Sanz. Su participación ha sido fundamental para hacer realidad este Tratado.
Para establecer una red efectiva de santuarios marinos y asegurar la protección del 30% del océano antes del año 2030, Greenpeace exige que:
Además, Greenpeace junto a millones alrededor del mundo están pidiendo a los gobiernos una moratoria sobre la minería submarina, una actividad potencialmente devastadora para los ecosistemas oceánicos.
Imágenes disponibles:
Pueden ser consultadas aquí.
| Cifra | Descripción |
|---|---|
| 60 | Ratificaciones necesarias para que el Tratado de los Océanos entre en vigor. |
| 30% | Porcentaje de aguas internacionales que se deben proteger antes de 2030. |
| 12 millones km² | Área que los Estados deben proteger anualmente para alcanzar el 30% antes de 2030. |
| 0.9% | Porcentaje actual de aguas internacionales que está completa o altamente protegida. |
El Tratado Global de los Océanos ha alcanzado 60 ratificaciones, lo que permite su entrada en vigor en 120 días.
El objetivo es proteger el 30% de las aguas internacionales antes de 2030 mediante la creación de santuarios marinos.
Los Estados deben proteger anualmente un área equivalente al tamaño de Canadá para alcanzar el objetivo del 30% antes de 2030.
España se convirtió en el primer país europeo en ratificar el acuerdo el 4 de febrero, mostrando liderazgo en la protección oceánica.
Millones de personas, incluyendo personalidades como Javier y Carlos Bardem, Penélope Cruz y otros, han respaldado esta campaña.
Greenpeace insta a los gobiernos a trabajar en la declaración de santuarios marinos y asegurar que estas zonas estén altamente protegidas.
La minería submarina es una forma destructiva de extracción que podría dañar irreparablemente los océanos, por lo que Greenpeace pide una moratoria sobre esta práctica.