El tratado de la ONU sobre alta mar ha alcanzado el umbral de 60 ratificaciones necesarias para su entrada en vigor, programada para enero de 2026. Este acuerdo histórico establece normas vinculantes para la conservación y uso sostenible de la biodiversidad marina, así como para la creación de áreas protegidas y la cooperación científica. Adoptado tras casi dos décadas de negociaciones, el tratado es considerado un paso crucial en la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Líderes mundiales han celebrado este avance como un logro significativo para el océano y la humanidad, instando a más países a unirse al pacto.
Un tratado histórico de la ONU destinado a proteger la biodiversidad marina en alta mar ha alcanzado las 60 ratificaciones necesarias para su implementación, lo que permitirá su entrada en vigor en enero de 2026. Este avance significativo se produjo tras la reciente ratificación por parte de Marruecos y Sierra Leona, que se sumaron como los Estados número 60 y 61 del acuerdo.
Conocido formalmente como el Acuerdo sobre la Conservación y el Uso Sostenible de la Diversidad Biológica Marina de las Zonas situadas fuera de la Jurisdicción Nacional (Acuerdo BBNJ), este pacto fue adoptado por los Estados Miembros de la ONU en junio de 2023, tras casi dos décadas de negociaciones.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, celebró este logro, describiéndolo como un «logro histórico para el océano y el multilateralismo». En un comunicado, Guterres destacó que «en dos años, los Estados han convertido el compromiso en acción, demostrando lo que es posible cuando las naciones se unen por el bien común».
El acuerdo es visto como una respuesta crucial ante la crisis planetaria del cambio climático, así como ante la pérdida de biodiversidad y la contaminación. Guterres subrayó que este tratado representa un salvavidas tanto para los océanos como para la humanidad.
El pacto, también conocido como «tratado de alta mar», abarca aproximadamente dos tercios de la superficie oceánica mundial que se encuentra más allá de las fronteras nacionales. Establece normas vinculantes para conservar y utilizar sosteniblemente la biodiversidad marina, así como para compartir equitativamente los beneficios derivados de los recursos genéticos marinos.
La directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Inger Andersen, también expresó su satisfacción por este hito. Andersen afirmó: «Nuestro océano es el fundamento de nuestra existencia. Hoy dimos un paso importante para salvar nuestro océano y nuestro futuro».
Este Acuerdo se basa en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, considerada la «constitución de los océanos». Una vez que entre en vigor el 17 de enero de 2026, proporcionará un marco global que ayudará a alcanzar objetivos internacionales relacionados con la biodiversidad. Esto incluye el compromiso de proteger el 30% de las áreas terrestres y marinas para 2030 bajo el Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal.
Guterres instó a todos los Estados Miembros restantes a ratificar el tratado sin demora y solicitó a los socios internacionales que apoyen su rápida y completa implementación. «La salud del océano es la salud de la humanidad», concluyó.
| Cifra | Descripción |
|---|---|
| 60 | Número de ratificaciones requeridas para la entrada en vigor del tratado. |
| 61 | Número total de partes del pacto tras la reciente ratificación. |
| 17 de enero de 2026 | Fecha en que entrará en vigor el tratado. |
| 30% | Porcentaje de áreas terrestres y marinas a proteger para 2030 según el acuerdo. |
El tratado establece normas jurídicamente vinculantes para conservar y utilizar sosteniblemente la biodiversidad marina, compartir más equitativamente los beneficios de los recursos genéticos marinos, crear áreas protegidas y fortalecer la cooperación científica y la creación de capacidad.
El tratado de alta mar entrará en vigor el 17 de enero de 2026.
Se requieren 60 ratificaciones para que el tratado entre en vigor, y ha alcanzado este umbral recientemente.
António Guterres lo calificó como un "logro histórico para el océano y el multilateralismo", destacando que es un salvavidas para el océano y la humanidad frente a crisis como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación.
El pacto cubre dos tercios de la superficie oceánica mundial que se encuentra más allá de las fronteras nacionales.
El acuerdo proporcionará un marco global para ayudar a alcanzar los objetivos internacionales de biodiversidad, incluido el compromiso de proteger el 30% de las áreas terrestres y marinas para 2030 bajo el Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal.