Los Estados miembros de la ONU han reafirmado su compromiso con el desarrollo sostenible mediante una nueva declaración que busca acelerar la implementación de la Agenda 2030. Este enfoque incluye fortalecer el financiamiento para el desarrollo, proteger los océanos, promover la igualdad y empoderar a las mujeres, así como fomentar alianzas globales inclusivas. La declaración destaca la necesidad de políticas que impulsen el emprendimiento y la educación inclusiva, además de abordar la crisis oceánica como una emergencia global. Se subraya el papel crucial de las mujeres en el desarrollo sostenible y se hace un llamado a reformar la arquitectura financiera internacional para mejorar la asistencia al desarrollo. Con esta iniciativa, los países buscan revitalizar el multilateralismo y traducir compromisos en acciones concretas hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Los Estados miembros de la ONU han renovado su compromiso con el desarrollo sostenible, presentando un conjunto de compromisos para acelerar la implementación de la Agenda 2030. Este anuncio, realizado durante el Foro Político de Alto Nivel sobre Desarrollo Sostenible, se centra en fortalecer el financiamiento para el desarrollo, proteger los océanos, promover la igualdad y el empoderamiento de las mujeres, así como fomentar alianzas globales inclusivas.
La declaración ministerial, que forma parte de la revisión intermedia de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), aborda integralmente los desafíos económicos, sociales y ambientales que enfrentan diversas naciones, especialmente aquellas en vías de desarrollo, pequeños Estados insulares y países menos avanzados.
Entre los compromisos destacados se encuentra la promoción de políticas que impulsen el desarrollo productivo y fomenten el emprendimiento. Se hace hincapié en la importancia de crear empleos decentes, así como en apoyar a micro, pequeñas y medianas empresas y cooperativas dentro de las economías formales e informales a lo largo de toda la cadena de valor.
Asimismo, se subraya la necesidad de invertir en educación inclusiva, equitativa y de calidad, abarcando todos los niveles educativos. Esto incluye un enfoque especial en la primera infancia, formación profesional y desarrollo continuo de habilidades. También se promueve la movilidad laboral mediante el reconocimiento mutuo de competencias y calificaciones.
El documento también resalta el ODS 14, que se refiere a la conservación y uso sostenible de los océanos. Los países han reconocido la crisis oceánica como una emergencia global y se han comprometido a implementar medidas transformadoras para restaurar ecosistemas marinos, prevenir la contaminación y fomentar economías oceánicas sostenibles.
La declaración enfatiza la relevancia del Acuerdo sobre Alta Mar adoptado bajo la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar. Además, menciona la Estrategia 2023 de la Organización Marítima Internacional, destinada a reducir las emisiones del transporte marítimo. También reafirma la necesidad urgente de eliminar la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.
En otro aspecto crucial, se reafirma el compromiso hacia la igualdad de género y el empoderamiento pleno de todas las mujeres y niñas. Se busca garantizar que disfruten plenamente de todos sus derechos humanos y libertades fundamentales durante toda su vida.
Este compromiso implica establecer medidas jurídicas e institucionales junto con políticas sociales integrales, asegurando así una participación efectiva e igualitaria para las mujeres en todos los ámbitos políticos, económicos y públicos. La declaración reconoce a todas las mujeres y niñas como agentes clave para el desarrollo sostenible, contribuyendo a sociedades pacíficas e inclusivas.
A través del documento presentado, los países reafirman su compromiso con la Agenda de Acción de Addis Abeba y respaldan los resultados obtenidos en Sevilla durante la Cuarta Conferencia Internacional sobre Financiamiento para el Desarrollo. En este contexto, se destaca la necesidad imperiosa de reformar la arquitectura financiera internacional, aumentar la asistencia oficial al desarrollo y mejorar una gobernanza económica global más representativa.
También se insta a las economías desarrolladas a cumplir con el objetivo del 0,7% del PIB destinado a asistencia al desarrollo. La declaración aboga por una cooperación fiscal internacional más robusta bajo el marco ONU y pide esfuerzos adicionales para canalizar los derechos especiales de giro del Fondo Monetario Internacional (FMI) hacia aquellos países más necesitados.
A modo adicional, los Estados celebran las 37 Revisiones Nacionales Voluntarias presentadas durante el Foro e invitan a todos los países a elaborar hojas de ruta hasta 2030. Se enfatiza en involucrar a gobiernos locales, sociedad civil y otros actores en la implementación y monitoreo efectivo de los ODS, promoviendo un enfoque participativo e inclusivo dentro del marco establecido por la Agenda 2030.
A través de esta declaración colectiva, se busca revitalizar el multilateralismo global e impulsar acciones concretas que aceleren el cumplimiento efectivo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en los próximos cinco años.
Los Estados miembros de la ONU han reafirmado su compromiso con la implementación de la Agenda 2030, enfocándose en el fortalecimiento del financiamiento para el desarrollo, la protección de los océanos, la igualdad y empoderamiento de la mujer y la promoción de alianzas globales inclusivas.
La declaración ministerial se centra en abordar desafíos económicos, sociales y ambientales, especialmente para las naciones en desarrollo y los países menos adelantados, promoviendo políticas de desarrollo productivo y educación inclusiva.
Se reconoce la crisis oceánica como una emergencia global y se comprometen a tomar acciones transformadoras para restaurar ecosistemas marinos, prevenir la contaminación y promover economías oceánicas sostenibles.
La declaración reafirma el compromiso con la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas, garantizando su participación plena en todos los ámbitos de la vida política, económica y pública.
Los países reafirmaron su compromiso con la Agenda de Acción de Addis Abeba, destacando la necesidad de reformar la arquitectura financiera internacional y aumentar la cooperación fiscal internacional para mejorar el financiamiento al desarrollo.
Se invita a todos los países a preparar hojas de ruta para sus revisiones hasta 2030 e involucrar a gobiernos locales, sociedad civil y otros actores en la implementación y monitoreo de los ODS.