El Gobierno español ha aprobado destinar 500 millones de euros para mejorar la eficiencia energética en la industria y los servicios. De esta cantidad, 300 millones se asignarán a proyectos de ahorro y eficiencia en el sector industrial, mientras que 200 millones irán destinados a la rehabilitación energética de edificios en el sector terciario. Las comunidades autónomas serán responsables de gestionar estos fondos, que buscan cumplir con los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2023-2030. Las ayudas se otorgarán a fondo perdido y deberán demostrar un ahorro energético mínimo del 20%. Este programa es parte del Fondo Nacional de Eficiencia Energética y se espera que contribuya significativamente a reducir el consumo energético en España.
El Consejo de Ministros ha dado luz verde a una significativa iniciativa destinada a mejorar la eficiencia energética en España. A propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), se han asignado 300 millones de euros para proyectos de eficiencia y ahorro en el sector industrial, mientras que 200 millones se destinarán a la rehabilitación de edificios en el ámbito terciario. Esta medida forma parte del Plan Estratégico 2024-2026 del Fondo Nacional de Eficiencia Energética (FNEE).
La gestión de estos fondos recaerá en las comunidades autónomas, que serán responsables de publicar las convocatorias correspondientes. El reparto específico de los recursos se determinará durante la Conferencia Sectorial de Energía, donde se establecerán las directrices sobre las tipologías de actuación y los sectores beneficiarios.
El programa destinado a la eficiencia energética en pequeñas y medianas empresas (pymes) y grandes industrias contempla mejoras tecnológicas en equipos y procesos, con un objetivo de ahorro energético superior al 10%. También incluye la implementación de sistemas de gestión energética que optimicen el consumo.
En cuanto al Programa de Rehabilitación Energética en el Sector Terciario (PREE terciario), las intervenciones abarcarán una amplia gama de instalaciones, desde centros administrativos hasta espacios culturales y deportivos. Estas actuaciones deberán demostrar un ahorro energético mínimo del 20%, priorizando mejoras en la envolvente térmica, así como en la eficiencia de sistemas térmicos e iluminación.
Los beneficiarios incluyen tanto personas físicas que realicen actividades económicas como entidades jurídicas propietarias o gestoras de edificios. Esto abarca agrupaciones de propietarios, comunidades energéticas y cooperativas, entre otros actores del ámbito social y económico.
Todas las ayudas se otorgarán a fondo perdido, lo que significa que no requerirán reembolso, siempre que se justifique adecuadamente el cumplimiento de los requisitos establecidos por cada comunidad autónoma. Este enfoque contrasta con las ayudas territorializadas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), ya que aquí será el Estado quien apruebe los fondos y defina las líneas generales para su uso.
Estos programas están alineados con los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2023-2030, contribuyendo al ahorro energético requerido por la Directiva (UE) 2023/1791. En este contexto, es importante destacar que los edificios existentes son responsables aproximadamente del 30% del consumo final energético en España, lo que convierte su rehabilitación en una prioridad estratégica.
A nivel industrial, iniciativas anteriores como el Real Decreto 263/2019 han demostrado ser efectivas; este decreto permitió distribuir 652 millones a comunidades autónomas para llevar a cabo más de 2.600 proyectos enfocados en el ahorro energético, logrando un impacto significativo con un ahorro total estimado en 816 ktep.
Cifra | Descripción |
---|---|
500 millones | Total destinado a mejorar la eficiencia energética |
300 millones | Destinados a la industria |
200 millones | Destinados al sector terciario |
10% | Ahorros superiores en el sector industrial |
20% | Ahorro de energía requerido en el sector terciario |
El Gobierno destina un total de 500 millones de euros, de los cuales 300 millones son para el sector industrial y 200 millones para la rehabilitación de edificios en el sector terciario.
Las comunidades autónomas serán responsables de gestionar los fondos, y el reparto se aprobará en la Conferencia Sectorial de Energía.
Se financiarán actuaciones que mejoren la tecnología en equipos y procesos industriales, con ahorros superiores al 10%, así como la implantación de sistemas de gestión energética.
Las actuaciones deberán acreditar un ahorro de energía del 20% y centrarse en la mejora de la envolvente térmica, eficiencia en instalaciones térmicas, iluminación y sistemas de automatización y control.
Pueden ser beneficiarios personas físicas que realicen actividades económicas, propietarios de edificios, agrupaciones de propietarios, empresas explotadoras, comunidades energéticas y cooperativas, entre otros.
Las ayudas se otorgarán a fondo perdido y se entregarán una vez que el destinatario haya justificado el cumplimiento de la actuación subvencionable según los requisitos establecidos por las comunidades autónomas.
Los programas buscan contribuir a alcanzar los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2023-2030 y ayudar a reducir el consumo energético en sectores clave como la industria y el terciario.