La estructura causante de estas muertes de aves es una planta inaugurada en febrero de este año, y que llama la atención por no generar energía mediante paneles solares fotovoltaicos sino que utiliza más de 300.000 espejos que cubren 1.416 hectárea para reflejan los rayos solares y concentrar toda esa energía hacia la superficie de tres torres con calderas.
De acuerdo a la CBC, 28.000 muertes de aves se han producido anualmente y dada la magnitud, las autoridades realizarán un seguimiento a fondo de las causas de las muertes de aves.
La compañía afirmó que la cifra era falsa y que sólo 1.000 criaturas morían al año, por el efecto reflectante que generan los espejos y que atraen a las aves e insectos de los que se alimentan a acercarse. Una cifra muy distinta a la que denuncia el Centro para la Biodiversidad Biológica de Estados Unidos.