El desalojo, en el que un total de 169 inmigrantes fueron llevados en varios vuelos hacia Palermo y Roma, donde serán alojados en otros de estos centros llamados de Identificación y Expulsión, se ha producido después de que una televisión emitiera un vídeo en el que se veía a varios inmigrantes en fila y desnudos, a la intemperie, para ser desinfectados de la sarna en el centro de Lampedusa.
Como protesta ante las condiciones en las que viven estos inmigrantes, el domingo pasado el diputado italiano del Partido Demócrata (PD) Khalid Chaouki, de origen marroquí, se encerró con carácter indefinido en este centro de Lampedusa.
Chaouki ha denunciado desde el interior de la estructura las condiciones "infrahumanas" en las que son obligados a vivir estas personas, con habitaciones con goteras y sin los mínimos servicios higiénicos.
El político reiteraba que no se marchará del centro hasta que esté totalmente vacío y que esperará a que se resuelva la situación de las 17 personas aún alojadas, que permanecen en Lampedusa en espera de ser interrogadas respecto a la investigación sobre el naufragio del 3 de octubre, naufragio en el que perdieron la vida frente a las costas de esta isla más de 360 personas.
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