Según ha informado este domingo la Dirección General de Policía, los acusados mantenían conversaciones en las que intercambiaban sus experiencias personales referidas a abusos y relaciones sexuales con menores, presuntamente cometidos por ellos mismos.
Los detenidos están acusados de cometer delitos de proposición para el homicidio, agresión sexual, abuso sexual, corrupción de menores, trata de seres humanos y tenencia de pornografía infantil, según los casos.
Los arrestados, de edades comprendidas entre los 25 y 60 años y residentes en distintas provincias españolas, compartían material pornográfico en el que aparecían menores a través de portales y chats de Internet.
Un año de investigación
La operación -en la que se ha imputado a 2 personas- se inició hace más de un año cuando una persona puso en conocimiento de los agentes que había contactado a través de Internet con uno de los ahora detenidos, quien le había propuesto que formase parte de una trama en la que se compartía pornografía infantil y se hablaba de prácticas sexuales aberrantes con menores.
Los agentes lograron identificar a las personas que participaban en estas conductas presumiblemente delictivas.
En el marco de las investigaciones realizadas se supo que, además de compartir archivos de pornografía infantil, algunos de los detenidos confesaban haber cometido abusos sexuales. Incluso llegaron a hablar de secuestrar a niños y someterlos a prácticas sádicas. Plantearon además utilizar a menores en orgías o someterlos a encierros en condiciones infrahumanas o de iniciar en prácticas sexuales a niños a los que previamente drogarían para que no pudieran recordar los abusos.