Los lobbies pronucleares ganan

Los lobbies pronucleares ganan

jueves 16 de octubre de 2014, 19:14h

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Las principales organizaciones ecologistas y el PSOE lamentan "la pérdida de credibilidad" del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) tras ceder ante presiones de los lobbies pronucleares y del PP.

El portavoz de Ecologistas en Acción, Francisco Castejón, ha denunciado que el Ministerio de Industria se ha plegado a las presiones del lobby nuclear y ha puesto "en un brete a sus propios técnicos, obligados a emitir un informe en 5 días laborables" cuando el pasado día 16, el Ministerio de Industria solicitó al CSN un informe sobre la petición de Nuclenor (propietaria de Garoña) de un nuevo plazo para poder evaluar si alarga el funcionamiento de la planta, que expiraba el próximo 6 de julio.

Y es que según Castejón, "la imagen que proyecta el CSN a nivel nacional e internacional no puede ser más nefasta; teníamos a media Europa mirando a nuestro regulador y nos lo hemos cargado" y también ha destacado  las medidas de seguridad que hay que adoptar aunque Garoña esté en parada fría (Nuclenor no pretende producir electricidad durante el año prorrogado).

En el mismo sentido, Carlos Bravo, portavoz de la asociación Salvia, ha explicado a EFE que no hay "precedentes" de una nuclear que pida parar voluntariamente y sin producir. Es una situación anómala".

Después de calificar de "tomadura de pelo" lo ocurrido, Bravo ha valorado como poco serio que se exija a las direcciones técnicas del CSN la emisión de un informe en un plazo tan breve, cuando en 2012 el Consejo de Seguridad Nuclear dijo necesitar 9 meses. En 2012, el Ejecutivo estableció la posibilidad de ampliar la vida útil de Garoña, pero sus propietarios la rechazaron entonces.

Greenpeace también ha lamentado la pérdida de credibilidad del CSN, "obligado a una decisión política en materia de seguridad nuclear". Ello "afecta negativamente al rigor y a la profundidad necesarios para realizar las inspecciones, y a la evaluación de las modificaciones tanto del plan de cese de la explotación; como del nuevo proceso inédito abierto; como del plan de acción relativo a las pruebas de resistencia que tienen aprobado y en ejecución". A juicio de esta organización, han prevalecido los intereses económicos de Nuclenor sobre la protección de la población y el medio ambiente.

"El CSN ha sido obligado por el PP para que el Gobierno tenga una coartada: les han obligado a renunciar a la independencia en la defensa de la seguridad nuclear". "Si el ministro de Industria rectifica sus leyes al dictado de Iberdrola y Endesa, Greenpeace lo va a denunciar en los tribunales", ha declarado tajantemente Mario Rodríguez, director Ejecutivo de Greenpeace.

El presidente de la Fundación Renovables, Javier García Breva, ha explicado que la decisión adoptada tiene una lectura "muy negativa, en el sentido de que el CSN no ha tomado una decisión basada en criterios" técnicos sino ideológicos. Garoña ya ha cumplido su utilidad porque estaba diseñada para 40 años y "ahora su potencia es innecesaria en el sistema eléctrico", ha añadido García Breva, quien ha indicado "sobra el 60 % de la potencia eléctrica instalada, con lo cual Garoña prácticamente es prescindible".

El PSOE tacha las injerencias del PP como intolerables

La miembro del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y exministra socialista de Medio Ambiente, Cristina Narbona, también ha denunciado que el Gobierno ha ejercido "presión" para que el organismo se pronunciara este viernes a favor de la continuidad de la central de Garoña.

Narbona y la también consejera socialista Rosario Velasco han votado hoy en contra de la petición de Nuclenor (propietaria de Garoña) de pedir un plazo adicional de un año para poder considerar la renovación de su licencia de explotación, mientras que los dos consejeros del PP -Fernando Castelló y Fernando Martí- y el de CiU -Antonio Gurrí- han votado afirmativamente.

El próximo lunes, Velasco, Narbona y Gurrí presentarán votos particulares para explicar el sentido de sus posiciones. Narbona ha tachado las "presiones" del Ministerio de Industria de "intolerables" e "injustificables" y ha afirmado que el Gobierno ha utilizado el Consejo "para intereses económicos".

"Es un ataque la independencia del Consejo de Seguridad Nuclear que no se justifica", ha afirmado la exministra, en cuya opinión Nuclenor (participada al 50% por Endesa e Iberdrola) podría haber cesado su actividad el próximo 6 de julio como estaba previsto y pedir, a posteriori, una renovación de la licencia de explotación.

Además, ha señalado que este hecho ha supuesto el "desprecio olímpico" de 3.000 horas de trabajo invertidas por los técnicos del CSN desde el enero último para preparar el procedimiento de cese de explotación de la central.

Según Narbona, lo ocurrido con Garoña es un "precedente malo", porque significa dar "autorizaciones exprés al gusto del consumidor" y eso "va en contra de todas las prácticas y evolución del CSN". "Preocupa que esta decisión forzada por el Gobierno reste credibilidad al Consejo de Seguridad Nuclear", un organismo autónomo y supuestamente independiente que solo debería rendir cuentas al Parlamento.

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