La dulce niña Carolina

La dulce niña Carolina

jueves 16 de octubre de 2014, 19:14h

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Carolina es el último personaje al que Federico Moccia da vida en su más reciente novela, Hora Punta te cuenta todos los detalles.

Este autor italiano se ha ido haciendo un hueco entre los primeros puestos de la literatura del género romántico y juvenil tras el éxito abrumador de sus anteriores publicaciones: A tres metros sobre el cielo, Tengo ganas de ti, Perdona si te llamo amor y Perdona pero quiero casarme contigo. Moccia hizo su última aparición con “Carolina se enamora”, el pasado enero de este año.

La historia nos arrastra a su inconfundible marco bajo la ciudad de Roma, dónde nos relata la historia del primer amor de Carolina. Una joven de 14 años como cualquier otra a esa edad, preocupada por sus amigos, las fiestas, los teléfonos móviles, los caprichos por los ciclomotores y el deseo de vivir su primer amor.

Caro se ha cruzado con varios chicos a lo largo de su vida, pero ninguno ha resultado ser el indicado para ella, pero todo esto cambiará cuando conozca a Massimiliano. Un apuesto desconocido con el que el caprichoso destino querrá volver a juntar después de un encontronazo fortuito.

Federico nos cuenta el romance de la joven protagonista con un gancho a su favor, ya que es fácil identificarse con ella al rememorar esa etapa de la adolescencia en la que todo parece más importante de lo que en realidad es. Carolina contará su enamoramiento mezclando el carácter familiar e intergeneracional que hasta ahora no había estado presente en las novelas del escritor italiano.

Ahora, diez meses después de su publicación y a la espera de otro de sus relatos, “Carolina se enamora” que en realidad se publicó con el nombre de “Amore 14” ha recogido tantos admiradores como detractores.

Así, Federico es considerado por un lado, como el mayor autor de la novela romántica de la actualidad que permite transportar al lector hacía el interior de la novela; mientras que por otro, las crudas críticas lo califican como otro escritor más, basado en tópicos y modas adolescentes cuya literatura no contiene ningún trasfondo del que pueda sacarse algo útil, sino que se traduce en una historia más para pasar el rato.

Finalmente las cifras de ventas y la permanencia en las listas de los más vendidos no fueron las esperadas, ya que se trataba de una historia demasiado “predecible y normal” que eliminaba cualquier intriga o emoción a la novela y el final, más que anticipado, cerraba una historia corriente.

Pero para gustos, colores.

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