El reality más visto de la televisión vuelve a triunfar en la noche del lunes. Como la semana pasada, ‘Gran Hermano’ se anota un 18,9% mientras que su rival en la parrilla, ‘Splash! Famosos al Agua’, obtiene su peor cifra hasta ahora. No es de extrañar que las audiencias favorecieran a Mediaset, pues la gala número 6 de esta edición fue una de las más entretenidas de la temporada.
El equipo de ‘Gran Hermano’ llevaba planeando la expulsión disciplinaria de Danny desde el pasado miércoles. Tras sus declaraciones en el interior, donde afirmaba que había pactado el posado de su novia; y el descubrimiento de dos entrevistas llevabas a cabo por el concursante antes de entrar en el reality fueron razones suficientes para que el DJ dejara de formar parte del concurso.
Mercedes Milá no permitió que sus compañeros se despidieran de él y lo recibió en plató con muy malos modales, sin dejarle hablar ni dar su visión de los hechos y asegurándole que no volvería a pisar un plató de Telecinco nunca más. Al comienzo del programa, expulsó a su novia y a su representante en el concurso y, de la misma manera, lo hizo con el ya ex concursante.
La audiencia decidió que Iván debía abandonar la casa esta semana. Tras varios altercados y una polémica continua dentro de la casa de Guadalix, el Tony Manero de esta edición no se sorprendió de su salida y aterrizó en el plató sereno. Pudimos conocer a Meri, su novia, tan mencionada y, en ocasiones, el motivo de las preocupaciones del imitador de artistas. Como era de esperar, Iván tuvo que enfrentarse a sus mayores enemigas del concurso, Leti y Lorena.
Para Edoardo (Dodo), la estancia en ‘Gran Hermano’, ha sido más fugaz de lo que se merecía. El italiano tuvo que marcharse del concurso por la vuelta de Kristian ya que, según Mercedes Milá, no había sitio para ambos. Hay que recordar que el “pelocho” se vio tan afectado con el mensaje de despedida de su compañero que pidió al Gran Hache que volviera. Edoardo ha vivido una semana estupenda junto a los demás concursantes y, quizá, haya avanzado un poco en su conquista a Susana.
Las nominaciones fueron “express”. Todos los habitantes de la casa, ordenados en una cola, tuvieron que nominar en un plazo de cinco minutos a un concursante. Todos oyeron los nombres y las razones, por lo que no tardaron en surgir las tensiones entre los compañeros. Al final, la lista para el próximo lunes quedó en Noe, Juan Carlos y Susana.
Tampoco faltaron las tensiones en el plató. Miguel, el novio de Miriam, acudió a la gala y vio las imágenes de su prometida besándose con Igor. Admitió que se encontraba mal y que tendría que mantener una seria conversación cuando saliera de la casa, pero no se atrevió a posicionarse ni a juzgarla para no dañar su posición en el programa. El público está deseoso de que la alicantina salga a la palestra para poder expulsarla, pero todavía no parece que esto vaya a ocurrir.
Pero no todo fueron malas noticias. Sonia por fin pudo reencontrarse con Kristian tras una semana de incertidumbre. Fue la primera en descubrir el juego de los gémelos y, al igual que los demás concursantes, se quedó perpleja al comprobar que no existía solo un
Gonzalo, sino que habían dos exactamente iguales. A pesar de que en ‘Gran Hermano’ ya se hubiera hecho una prueba similar con las hermanas Conchi y Pamela en la novena edición, ninguno se imaginaba que el sevillano (o los sevillanos) hicieran algo parecido.
Pero el apartamento no se queda vacio. Esta semana, sus ocupantes serán Desireé y Adrián, ambos sevillanos y con muy buen feeling desde el principio. Su misión consistirá en entrar en la casa de ‘Gran Hermano’ y robar lo que el Súper les ordene. De nuevo, el reality repite juegos y parece que el equipo va quedándose escaso de ideas.
Por suerte, los nuevos concursantes seguro que aportarán la chispa que el programa necesita para no decaer.
Si (
No(
