Ante "la percepción de cuantiosas dádivas procedentes del entorno de Francisco Correa bien en efectivo bien en forma de viajes, coches u otros regalos al menos desde el año 2000 hasta el año 2005 la Fiscalía Anticorrupción ha citado a este trabajador del PP, que no se puede despedir por ser imputado, porque si no lo tendrían que readmitir por despido improcedente o pagarle un despido demasiado cuantioso, al parecer para el PP.
El magistrado ha citado a declarar a Sepúlveda para el próximo 13 de febrero, según se recoge en una providencia dictada hoy, por la supuesta comisión de un nuevo delito de cohecho.
Esta citación se produce en virtud del informe remitido la semana pasada por la Unidad contra la Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional, y en el que se destacan los pagos aparecidos en la documentación contable secreta de Francisco Correa.
El informe es fruto del análisis de los apuntes de la cuenta personal de Sepulveda dentro del sistema de contabilización de fondos B de la organización liderada por Correa que fue intervenida en el registro de una nave industrial del polígono Ventorro del Cano, en Alcorcón (Madrid).
En esta contabilidad queda o parece quedar patente que la trama de corrupción del 'caso Gürtel' habría pagado varios viajes, bolsos de Louis Vuitton y fiestas familiares a la actual ministra de Sanidad y su ex –marido, quedando Ana Mato en una situación bastante comprometida, puesto que por motivos mucho más triviales (una multa no pagada) en otros países sí dimiten y ella y su marido se excusan diciendo que ella no sabía nada, algo realmente curioso porque recibir un jaguar y ser alcalde, en nuestro país siempre es motivo de sospecha.
Pero la documentación intervenida por la Policía Nacional no para ahí. También ha destapado la presunta financiación irregular de la campaña electoral del PP en las municipales de Pozuelo de Alarcón celebradas en mayo de 2003 ya que la trama del 'caso Gürtel' habría podido pagar varios actos electorales de Sepulveda y corrido con los gastos de su oficina electoral. Otro nuevo caso que conocemos, pero, cómo ya son tantos, no sabemos ya ni porqué indignarnos.
Si (
No(
