Los Osos Panda tienen la clave

Los Osos Panda tienen la clave

jueves 16 de octubre de 2014, 19:14h

Escucha la noticia

Los biocombustibles de segunda generación, aquellos que no utilizan para su fabricación materias primas que forman parte de la alimentación humana y animal y que, por lo tanto, no provocarán el hambre en el tercer mundo, están más cerca, gracias al análisis de los excrementos de los osos panda. En Hora Punta, te contamos por qué son tan especiales.

Los Osos Panda tienen la clave

Los biocombustibles pueden ser de dos tipos: de primera generación o de segunda generación. Los de primera generación utilizan como materia prima alimentos como el maíz y serían los responsables, según Intermón Oxfam y otras organizaciones humanitarias, del encarecimiento de estos alimentos que provoca el hambre a 30 millones de personas en países en vías de desarrollo.

Los de segunda generación se elaborarán a partir de mejores procesos tecnológicos y materias primas no utilizadas en alimentación y sin ocupar terrenos agrícolas, lo que permitirá, sin duda, el acceso a alimentos más económicos en los países que actualmente dedican parte de su producción a la fabricación de biocombustibles de primera generación. La clave para hacer la producción de estos biocombustibles más económica y sin usar esas materias primas se ha encontrado en bacterias halladas en los excrementos del oso panda.

Para ello, investigadores estadounidenses han tenido que analizar durante más de un año las heces de una pareja de osos panda del zoológico de Memphis. Pero el esfuerzo ha valido la pena, ya que han identificado varios tipos de bacterias digestivas, algunas similares a las que permiten degradar a las termitas la madera, pero más eficientes que estas a la hora de degradar la celulosa de las plantas.

La eficiencia de estas bacterias es tal que pueden llegar a convertir, según la investigación, hasta el 95% de la biomasa vegetal en azúcares simples, lo que no debe de extrañarnos puesto que la alimentación de los osos panda está basada en un 99% en el bambú.

Una vez que han llegado a esta conclusión y viendo que la utilización de las enzimas de estas bacterias podría significar el abaratamiento y la reducción del coste ambiental de los procesos de fabricación de biocombustibles, los científicos se han puesto a la búsqueda, identificación y captura de las bacterias con el fin de localizar a aquella que produzca la enzima más potente. Una vez encontrada, el paso más probable será la manipulación genética de alguna levadura para poder sintetizar la enzima de forma masiva.

El hallazgo puede ser tan importante que una de las investigadoras y coautoras del estudio ha señalado al descubrimiento como “una lección acerca de la importancia de la biodiversidad y de preservar los animales en peligro”.

Actualmente el oso panda es una especie en peligro crítico de extinción, con tan solo 1600 ejemplares en libertad en la reserva de Chengdu y 300 en cautividad, entre ellos los que podemos encontrar en Madrid.

Es tal la situación de este emblemático animal chino, que la Administración Forestal China ha puesto en marcha este mes de septiembre una nueva regulación sobre su exhibición en zoológicos y reservas naturales, de tal forma que sólo los animales de entre 2 y 25 años y criados en cautividad podrán ser exhibidos, y se veta además la toma de muestras durante la exhibición o el traslado de animales a lugares no determinados por las reservas originales. Con esto, se impide también la costumbre de los mandatarios chinos de regalarlos a otros países.

Muchos secretos guarda la Naturaleza y muchos se quedarán sin descubrir si nuestra actitud y la de muchos gobernantes con respecto al medio ambiente y la biodiversidad no cambia.

Los Osos Panda tienen la clave
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios