Tal y como cuenta el 'Us Weekly', la pizzería Arris, cada vez que los Bangelina asisten a ella, cierra las puertas al público para que disfruten plenamente de las instalaciones sin ser molestados ni acosados por nadie.
De esta manera sus seis hijos: Maddox, Pax, Zahara, Shiloh, Knox y Vivienne, pudieron hacer todo lo que se les antojo, ya que eran libres y no tenían a sus niñeras para regañarles: "Saltaban en las mesas e incluso se tiraban comida unos a otros", declara una fuente anónima al 'Us Weekly'.
"Brad y Angelina estaban sentados hablando entre ellos tranquilamente mientras los niños corrían alrededor de la mesa en círculos" afirma la misma fuente. Parece ser que a esta famosa pareja se les escapa un poco de las manos el control de sus pequeños, aunque parece no importarles demasiado.
Necesitarían un par de lecciones de nuestra supernanny.