La noche de los miércoles viene marcada por la nota cantante de los coaches de La Voz. David Bisbal, Malú, Rosario Flores y Melendi van consolidando sus grupos y cada vez lo tienen más complicado cuando se trata de elegir a sus componentes. Los estilos se completan, los nervios traicionan y las voces no dejan de sorprender nunca. Así fue la cuarta gala del novedoso formato presentado por Telecinco.
Efrén fue el encargado de romper el hielo, cautivando a Malú con una voz muy dulce. Nada que ver con Tony, rockero desde niño y acostumbrado a escuchar los discos del Boss, Bruce Springsteen. Versionando a la gran Tina Turner con Simply the best, todos los coaches pulsaron el botón sin dudarlo en ningún momento. Pero, como supuso David Bisbal, “la tierra tira mucho” y este asturiano eligió a su paisano Melendi como instructor en el camino del concurso.
Sharay Abellán, hija del periodista y locutor José Antonio Abellán, parecía conocer de toda la vida al equipo de La Voz. Cantando Fallin de Alicia Keys, muy utilizada en los concursos musicales, consiguió el apoyo de un Bisbal que ya casi tiene a todos los integrantes de su equipo. Miriam y Paola tuvieron menos suerte. Los nervios para la primera y la falta de un hueco en el programa para la segunda las dejaron a las puertas de participar en La Voz.
Lorena, curranta nata en una gasolinera, consiguió el favor de Rosario Flores con una bonita interpretación de Somewhere over the rainbow. Bisbal, apenado, confirmó que el estilo que ella defendía ya lo tenía completo. Y es que es la parte más complicada del casting, pues cada vez quedan menos espacios libres en los equipos.
Una de las cosas más llamativas de esta gala fue la actuación, por separado, de la pareja formada por Yhadira y Hugo quienes, a pesar de estar juntos sentimentalmente, no se han atrevido a ser pareja artística. Ella, versionando a Pablo Alborán con un encanto y un ángel espectacular, consiguió que se giraran Rosario y Melendi. Él no tuvo la misma suerte y quedó fuera del concurso.
Cautivadora y con muchísimo ritmo, Brequette, tuvo que sufrir hasta el último momento para que tres de los coaches se giraran. Melendi fue el único que no lo hizo. Con lágrimas en los ojos y sin apenas palabras, eligió a David Bisbal.
Eli se tiró a la piscina. Cantando una versión muy personal de Blanco y negro, consiguió sorprender a Malú a pesar de arriesgarse con una canción suya. Guitarra en mano, Noemí cautivó a Rosario con su voz y su estilo. Wicked game en su voz no parecía la misma canción y la pequeña de los Flores quedó prendada de su alternativo estilo.
Paco no se iba a conformar con cantar en la prueba. A pesar de no pasar el casting, aprovechó la oportunidad que le brindó el escenario de La Voz y disfrutó de su momento de gloria. La casi triunfita Claritzel apareció de nuevo en las pantallas de Mediaset. Estuvo a punto de participar en la edición de 2005 de Operación Triunfo, pero a causa de una enfermedad cardiaca repentina y una intervención de urgencia, su sueño se vio truncado. Ahora, ha vuelto con todas sus fuerzas para recuperar el tiempo perdido y arrasar en este nuevo formato. Al piano, sorprendió a Melendi, que quedó encantado de tenerla en su grupo.
Las audiciones a ciegas parecieron hechas a la medida de Beatriz. Esta tímida chica, insegura por la obesidad que sufrió tiempo atrás, se sintió como en casa sobre el escenario de La Voz. Melendi, Malú y Rosario Flores le dieron al pulsador. Finalmente, se quedó con Malú.
Los hermanos Mena, José y Alberto, afirman complementarse tan bien en el escenario como en la vida. Pero no parecieron convencer a ninguno de los coaches, quienes a pesar de su gran talento, lo tienen cada vez más complicado a la hora de elegir a los componentes de sus grupos. Eva María, arriesgándose con Desátame de Mónica Naranjo, marcó el punto y final de la gala y se quedó con David Bisbal tras haber sorprendido a los coaches con el chorro de su voz.
La primera parte de La Voz se acaba. David Bisbal y Malú llegan a la recta final con 11 componentes. Rosario Flores, con 10. Melendi encabeza la lista con 12 concursantes. La próxima gala será la última audición a ciegas y la oportunidad para elegir a los componentes que queden. En este punto, los equipos se cerrarán y llegará el momento de las batallas, donde los coaches enfrentarán a sus pupilos en parejas.
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