Utilidad intelectual: Pablo Iglesias
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Utilidad intelectual: Pablo Iglesias

Por Carlos González
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bergidahotmailes/7/7/15
miércoles 01 de marzo de 2017, 23:59h

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Siguiendo en la línea individual, ahora toca analizar al otro líder emergente, que, además, ha surgido de la nada, Pablo Iglesias.

Su aspiración individual es clara, como cualquier otro macho Alfa, un Reno, un Caballo, o un Bisonte, todos animales de grupo o rebaño, lo primero que quiere es insertarse como tal macho poderoso dentro de ese grupo. Alcanzar con ello su seguridad, comida y afectos, y más en su caso, obtener el máximo reconocimiento social posible. En los valores de esta sociedad, este consiste en ser reconocido como un macho lo más poderoso que pueda. Lo que vende es que aspira al poder total, a ser un líder indiscutible.

Su conducta y reacciones hasta este momento ya le han descrito mucho más allá de lo que piensa. Ha demostrado que sus aspiraciones son totalmente primarias. Cree, y así lo trasmite a sus seguidores y votantes, que lo que más le motiva es el bien de grupo en el que está inmerso, es decir, de España, o del Estado español, pero lo que en realidad le mueve absolutamente es “La idea que él tiene de lo que sería el bien para el Estado español”. Él ya tiene una idea clara de lo que sería el bien para España, y no está dispuesto a discutirlo con nadie. No busca el bien para todos decidido por nosotros, no, él ya sabe lo que nos conviene y va a luchar a tope por “Dárnoslo”.

No le motivan sus máximos amigos, porque no dejaría por el camino a Monedero, o más tarde al defenestrado secretario de organización, ahora a Rita y Tania, porque si así fuese, seguiría a su lado y no perseguiría su sueño, sus objetivos políticos. Es obvio que estos son más importantes que sus compañeros de viaje. Esta proyección nos lleva a que pasará por encima de quien sea, sacrificará hasta los más íntimos siempre y cuando él crea que son un obstáculo para alcanzar sus fines. ¿De quién se rodeará? De aquellos que sirvan sus planes, de los que de momento les sean útiles. ¿Y el día que se opongan porque creen que él está equivocado? Pues les suprimirá de la mejor forma posible y con el mínimo coste. ¿Se parará ante cualquier obstáculo? La Historia nos demuestra que tanto Fidel, como Lenin, como Stalin o Hitler, y Franco, fusilaron hasta a sus íntimos compañeros de armas si se opusieron a ellos o fue necesario para el escarmiento.

¿Está limitado por colectivo alguno? En absoluto. ¿Hay algún posible contrapeso al poder que alcance? Tampoco. Porque como él no pertenece a ninguna clase social que le aúpe al poder, a la que deba rendir cuentas, o empresas, bancos o colectivos que le apoyen y le exijan, él se va a creer legitimado única y exclusivamente por los votos de sus seguidores, y más aún, por sus exclusivos seguidores, porque si los votantes prefieren a la derecha es que están equivocados y él debe redimirlos. Los votos que no apoyen a su partido son votos errados que pertenecen a las fuerzas “Mentirosas”, “Manipuladoras” y lo que hay que hacer es no tenerlos en cuenta. Si algo nos ha demostrado la historia es que todos los líderes que surgieron con estos nuevos movimientos y que no se debían a fuerza existente alguna, lo que hicieron una vez alcanzado el poder es suprimir toda disidencia política y crear un partido único. Estúdiese el nacimiento y desarrollo de la propia Iglesia Católica en el año 313 de nuestra era y lo que hicieron menos de cien años después. Es calcado el comportamiento de Lenin, Mao o Fidel. Miremos hoy hacia Corea del Norte.

Pablo no concibe su integración dentro de un grupo con unas reglas del juego porque él es el grupo. Sólo él puede establecer las reglas del juego ejerciendo el liderazgo absoluto. Ya lo está haciendo, todo el que se le opone acaba en la cuneta y adquiere nuevos socios que sean los adecuados para su objetivo final. Mejor aún, los nuevos ya no son un freno por la amistad pasada y cuanto más se aparte de los antiguos, a los que algo siempre debe por los esfuerzos comunes, más libre se sentirá para expandir su única voluntad.

¿Cómo aspira –y de momento le va bien- alcanzar su objetivo único? Pues hablándole a la “Gente” -así les llama él- de lo que son unos maravillosos ideales. Unos mundos venideros que él como líder les facilitará. Con la virtud de la esperanza. Prometiendo acabar con toda la corrupción y maldad que hay en este mundo y creando un mundo mejor en el que los “Puros” vivirán sin los “Manchados” –sin la Casta- que ya habrán sido suprimidos.

Estudiado desde la Psico-Biología el comportamiento es de libro. Aspira a alcanzar el deseo primario de cada individuo en la naturaleza, “Lograr la máxima expansión de su voluntad”. No surge como miembro de un colectivo ya insertado y que le corresponda defender sus intereses con la limitación que su grupo supone. No, Él es solo Él, a nadie se debe, nadie le sujetará su voluntad y a nadie debe rendir cuentas, solo a dios. ¿A qué les suena esto?. Claro que su lenguaje es que solo se debe a la “Ideología”, al “Pueblo”, a la “Gente” como dicen sus seguidores. ¿Pero quién es la Gente? La que él y los suyos digan en cada momento que es, igual que el argumento de Dios ha servido –y aún sirve- para un roto y para un descosido.

Él es solo él. En solitario camina, solo, piensa, solo, actúa. Los demás son los peones necesarios para alcanzar sus gloriosos sentimientos. Sus mundos de ideas y consecuciones. Sus logros…Personales.

Solo, vivirá… Solo, morirá. Todo lo demás no es más que la proyección de su gloria.

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